Crónica de concierto de El Mastuerzo, en Luz de Gas

Por Daniel E. Ortega González, para MEXCAT

El pasado sábado las puertas de la emblemática sala Luz de Gas se abrieron para recibir a Francisco Barrios, El Mastuerzo, quien se presentó como parte del Festival BarnaSants. A las 21:30 horas en punto al escenario, que lucía una batería, un bajo y una guitarra al lado derecho, y un mural con una ventana del lado izquierdo, saltó El Mastuerzo y saludó a los presentes. “Buenas noches, muchas gracias a los trabajadores de este bonito congal. Este es un experimento que se llama ‘Los jij@s del ma@íz’” y comenzó la velada con “El rinoceronte de reversa”.

En el marco de la edición 17 del Festival Internacional BarnaSants, el “anarquista musical”, como se le anunció, aseguró que “uno viene a Europa y le gente en México ha de pensar que estamos cantando, como siempre, en las banquetas, pero se siente rebonito estar tocando aquí” aseguró antes de interpretar “Bartola”, el tema que le inspiró su perra.

Entre gritos y silbidos explicó que el tema “La ventana y el umbral” estaba inspirado en un libro de Armando Vega-Gil, su compañero de la banda “Botellita de Jerez” y “fue el detonante de los jij@s”, integrado por Gustavo Franco en el bajo y coros, Iker Moranchel en la guitarra y coros y Josué Vergara, batería.

“Guapo”, “Quiero un hijo tuyo”, gritaban entre el público, a lo que Barrios respondió con una carcajada. “Con esta rola quién quiera puede bailar un poco” dijo para dar paso, a ritmo de cumbia-rock a “Cantante una que nos sepamos todos”.

“Cuando vienes a la casa a cagar”, gritaron desde las butacas, a los que el también baterista respondió “cuando me invites una buena paella” lo que provocó las risas de los presentes. La capital catalana siempre agradece que se use el idioma de la región, “ustedes perdonarán mi mala pronunciación, me he aprendido esta canción de memoria, pero es con todo corazón” se excusó para interpretar en un pobre Catalán “La Rambla del Poble Nou”.

El recital continuo con “Nube risueña” y con otro guiño a las comunidades autónomas de España, interpretó en Euskera, idioma del País Vasco, los temas “Txoriak” y “Gutxi gora bera- Resistencia”.

“Esta canción está dedicada con todo mi amor a Martha de los Ríos, fundadora del Comité de madres de presos y desaparecidos políticos de Chihuahua quién falleció hace unos días” explicó antes de interpretar “Alicia, amor de mi vida”.

Sólo con su guitarra, entonó “Prohibido” para después dar paso a Armando Vega-Gil quién, vestido de negro, comenzó a recitar parte del poema “La ventana y el umbral”, mientras la banda musicalizaba y, del otro lado del escenario, Sergio Arau, aparecía para “abrir” la ventana y dejar al descubierto un lienzo en blanco en el que comenzó a trazar un mural.

“Ven y mira”, interpreto Mastuerzo mientras Arau continuaba su labor artística y Vega-Gil hacía un alto a su lectura. Un fragmento más del poema y ahora Arau paraba sus movimientos para dejar ver la imagen de un hombre encorvado hacia delante con la boca abierta sobre la cabeza de un niño.

Las notas de “La ventana y el umbral” sonaron mientras Arau retomaba la pintura para añadir la frase “jamás habrá silencio” y después unirse a sus dos compañeros al frente del escenario e intentar concluir la noche.

Pero no podía faltar el grito de “Otra” así que el cantante volvió. “Los artistas somos muy ególatras, así que yo hago como que me voy y ustedes vuelven a gritar ‘otra’”, dijo para presentar “El corrido del pasamontañas” que es “la respuesta del subcomandante a todos los gobiernos que han habido desde el surgimiento del conflicto en Chiapas”.

Así, concluyó una noche de “protesta y risas”, pero sobre todo de buen ambiente en el que le protagonista, El Mastuerzo, no dejo de lucir una gran sonrisa.